No sé ni por dónde empezar para escribir este post sobre la Titan Desert 2018. Llevaba tanto tiempo esperándolo, entrenando, preparándome mentalmente… que me parece imposible que ya haya pasado y sobre todo haberlo conseguido. Cuando me plantee ir, en todo momento soñaba con acabarla, pero estar ahí ya era un logro. Lo intenté dos años, y por problemas de salud no pude. Como siempre se dice, a la tercera va la vencida, y así fue para mí.

El fin de semana antes de ir (fuimos el sábado 28) tuve que ir a urgencias por un problema derivado de lo que tuve el año pasado.

Al final, con reposo y medicación todo quedó en un susto, y afortunadamente pude viajar hasta Marruecos.

Este es un reto que tenía cruzado, como una espinita clavada que necesitaba sacarme. Para mí ha sido un reto personal, y ahora un tick más en mi lista de sueños cumplidos. Y no podría haberlo hecho con nadie mejor que con mi hermano, Valentí Sanjuan. Él me ha apoyado siempre, pero más que nunca en esta aventura, donde no me ha dejado sola y me ha acompañado hasta la meta, pasase lo que pasase.

Yo le acompañé a él a muchas pruebas, y sé lo que se sufre cuando ves a alguien que quieres esforzarse y pasarlo mal, pero también lo gratificante que es el final, el “¡lo he conseguido!”, y no quiero dejar de darle las gracias por todo lo que ha hecho por mí. Por acompañarme en esto y en la vida en general.

Y sin enrollarme más, que cuando empiezo no acabo, paso a explicaros un poquito cada etapa, cómo fue y cómo la viví yo.

Etapas de la Titan Desert 2018

ETAPA 1

Punto de salida: Boumalne Dades
Llegada: Boumalne Dades
Km Crono: 115Km
Desnivel: 2.651m
Cota máxima: 2.367m

Fue muy dura. Al principio del día no daba ni un duro por mí, no tenía claro llegar antes del corte, que eran 11 horas y media, y esa se convirtió en mi obsesión. Finalmente lo conseguimos en menos de 9 (¡nos sobró tiempo y todo!), y no pude estar más orgullosa porque se trata de la etapa con más desnivel de todas las Titan Deserts de la historia. Además, después de todo lo que me ha pasado para mí fue un premio y una gran motivación ver que lo podía conseguir, y sobre todo sin ir justa de tiempo.

Al acabar la etapa no podía estar más feliz, pero en el km 50 estaba llorando como una condenada, a lágrima viva, porque no sabía muy bien cómo gestionar las emociones de todo lo que estaba viviendo. Eran lágrimas liberadoras, de las que dejan enterradas en la arena el lastre de experiencias muy dolorosas para mí ocurridas en los últimos 3 años. También a 5 minutos de la salida me pasó lo mismo. Emoción, nervios, presión, felicidad… Después de 3 años conseguía estar en una salida, no me lo podía creer. Y además con mi hermano; no podría estar con nadie mejor.

Mi hermano y Ester de Gordon Seen que estaba allí conmigo, se asustaron al ver que lloraba, pero les dije que no se preocuparan, que necesitaba soltar todo lo que llevaba retenido dentro y después de recibir sus abrazos, seguí la etapa más fuerte que nunca, a tope y dándolo todo.

Lo que peor llevé fue el desnivel, y mentalmente el miedo a que mi cuerpo dijese basta en algún momento. Todo el mundo comentaba que era la primera etapa y que había que «reservar» y yo lo estaba dando todo, y mi pregunta era: ¿y si no me queda para las siguientes etapas? ¡Esto acaba de empezar!

Al ser una etapa tan dura, la misma organización de la Titan Desert propuso, por primera ves en la historia, la opción de hacer un recorrido más corto, evitando un puerto duro y unos 20km a cambio de 10h de penalización en la clasificación, pero yo dije que nada de nada, que aunque llegara fuera de tiempo, quería intentarlo, que no recortaría ni un solo km.

Habíamos calculado 10:30 h., el tiempo de corte estaba en 11:30 h y nos sobraron más de dos horas hora y media, así que imaginaos el chute de energía que eso supuso.

Lo conseguimos y con creces!!! Y cada vez estaba más y más cerca de mi sueño: terminar la Titan Desert.

ETAPA 2

Punto de salida: Boumalne Dades
Punto de llegada: Alnif
Km Crono: 114km
Desnivel: 1.556m
Cota máxima: 2.168m

La segunda etapa fue una etapa con trampa, porque parecía que sería menos dura que la primera, pero se hizo muy cuesta arriba. Empecé la etapa y el día anterior ya habían aparecido las primeras y temidas llagas, me dolían una barbaridad y el mero hecho de estar sentada en la bici ya me dolía. Viendo el perfil del desnivel, pensábamos que en el km 50 ya no subiríamos prácticamente nada más con tanto desnivel. En teoría después de eso venía la bajada, pero no fue así, subimos dos puertos más e hicimos muchos km rompepiernas de sube-baja de esos que te dejan molido. Eso sí, hay que reconocer que tanto en la primera etapa como en esta segunda los paisajes eran preciosos.

Quizás si me lo hubiera encontrado el primer día hubiera sido más fácil, pero al ser el segundo me destrozó el alma, y más por el hecho de tener unas expectativas que luego no fueron reales. Me encontraba mal, me empecé a marear, no tenía hambre y sabía que no comer o no hidratarse bien en este tipo de pruebas es igual a muerte. A mitad del día me vine abajo, me quedaba más de la mitad de la etapa y estaba hecha una mierda, pero me di cuenta que esto era cíclico en mi. Cuando llegaba al límite de mis fuerzas, luego pensaba: «no van a poder conmigo», «puedo hacerlo», «lo haré», y resurgía con más fuerza que nunca, le daba gas a los pedales y solo pensaba en positivo.

Y llegamos!!, eso sí, petados, sin fuerza ni siquiera para celebrar que habíamos llegado, pero lo hicimos. Además, (que no se me pase este detalle porque es importantísimo) volvimos a hacer un tiempo mucho mejor de lo esperado, en poco más de 7 horas y media, y el corte estaba en 11. Otro chute de energia y positivismo para mí!

ETAPA 3

Punto de salida: Alnif
Punto de llegada: Rissani
Km Crono: 122km
Desnivel: 1.089m
Cota máxima: 975m

La Etapa de mi primera hostia con todas las letras! En la etapa 1 me caí, pero fue una caída controlada con derrape incluido. En cambio esta caída fue inesperada y dura. La tercera fue una etapa muy cabrona, que en principio tenía que ser la fácil, la rodadora. Larga porque constaba de 122km, pero sin más, pero finalmente no fue así. Los primeros 40km parecía que todo iba bien, pero empezaron los bancos de arena, que te lastran muchísimo, sobre todo en las llagas. 20 km de bancos de arena, que han resultado ser de lo peor de la Titan. Además, se le suma el sol, calor y viento en contra.

En un momento, mientras Valentí estaba grabando, yo dejé la mano para saludar y se me fue la bici. Nos pegamos una leche importante, pero por suerte nada grave. Quien lo sufrió más fue la cámara, que se rompió.

No las tuvimos todas con nosotros, pero lo conseguimos en 8 horas y 10 minutos.

El Sanjuan fue hablándome y haciéndome bromas para que me distrajese, y me fue genial, pero siempre hay un punto en el que tu cabeza hace un click, se da cuenta de lo que te queda, de la magnitud del asunto, y ya no valen los trucos con los que intentas engañar a tu mente. Es la puñetera realidad. Y cuando consigues de nuevo meter la cabeza donde quieres, lo consigues. 

ETAPA 4

Punto de salida: Rissani
Punto de llegada: Merzouga
Km Crono: 95km
Desnivel: 939m
Cota máxima: 805m

Las noches se me iban atravesando un poco. La primera tuve una especie de fiebre, que finalmente no lo fue pero que me hizo sentir como si lo fuera, la segunda dolor de espalda, y la tercera vomitando. En ese momento no puedes pensar que es una intoxicación, porque te desmoronas, por eso me autoconvencí de que algo me había sentado mal y ya está.

Salía con dolor de estómago que me impedía comer correctamente, con la mano con un taping y con un dedo inmóvil debido a la primera caída, no me encontraba bien y me dolía horrores sentarme en la bici por las llagas. Fue un drama físico y psicológico que llega un punto que asumes como algo normal. Sabes cuáles son tus cartas y las juegas lo mejor posible.

Valentí también se destrozó el culo, pero es que todo el mundo sufre de algo: intoxicación, dolor de músculos, caídas, rupturas de bici… La Titan Desert es una carrera muy exigente a nivel mecánico, físico, mental… A todos los niveles.

Cuando estábamos jodidos, y vimos que la cosa iba mal, decidimos darnos un poco de tregua. Disfrutar y no sufrir. Y es que somos unos motivados los dos, pero tenemos mucho dentro, muchos sentimientos que afloran sobre todo en momentos así, y por eso pensamos en guardar todo lo que viviéramos juntos como recuerdos bonitos y disfrutarlos al máximo. Mirábamos al cielo y de dedicábamos nuestras risas a nuestra madre y eso nos daba fuerzas para seguir disfrutando y riendo.

Durante las tres primeras etapas Valen sufrió mucho viéndome pasarlo mal, pero en esta se dio cuenta de que cuando estoy muy mal le doy la vuelta a la cabeza, saco emociones y me dan energía y fuerza, de que consigo sobreponerme pase lo que pase, y que no tenía que preocuparse tanto por mí.

En definitiva una etapa dura pero emocionaonante al 100%

ETAPA 5

Punto de salida: Merzouga
Punto de llegada: Merzouga
Km Crono: 94km
Desnivel: 590m
Cota máxima: 814m

En la penúltima etapa vino la hostia grande, la que no esperábamos y en la que lo pasé peor.

Me di un golpe tremendo, caí de cara sin tener tiempo de poner las manos para parar el golpe, me di contra un piedra, tenía todo el pómulo inflamado y mucho dolor de cabeza. El servicio médico enseguida me puso hielo y me dio paracetamol, y tras más de media hora examinándome y viendo cómo estaba me dijeron que podía seguir, que solo había sido un golpe pero que controlara en todo momento si me mareaba o perdia visión.

Fue el día de más calor, las rachas de viento eran bastante fuertes, y para rematar el tema se trataba de una etapa de navegación, no había un track marcado, solamente unos puntos CP y puntos de hidratación por los que debías pasar si o si para no ser penalizado. Estaba nerviosa, me dolía la cara y la cabeza, me mareaba, me daban nauseas… Y no tenía muy claro si se debía al golpe o al propio cansancio de la etapa. Así que no quería forzar la máquina pero no podíamos perder tiempo. Parecía imposible pero acabamos y de nuevo nos sobró tiempo.

Al llegar a meta volví a enfermería a que me curasen y a recuperarme, porque solo faltaba un día y valía la pena estar fuerte. Vamos, un día duro, pero otra vez inolvidable. Orgullosa de haber superado todos los obstáculos, me sentí de nuevo muy feliz.

ETAPA 6

Punto de salida: Merzouga
Punto de llegada: Maadid
Km Crono: 79km
Desnivel: 694m
Cota máxima: 902m

Por fin llegaba el final, la última etapa, donde conseguiría la piedra de finisher de la Titan Desert 2018, pero ahí no regalan nada. Fueron 79 km por dunas, con vendaval y cuestas donde tuvimos que cargar la bici. Sabes, o más bien dicho “crees”, que vas a llegar, pero igualmente es duro.

Lo mejor de todo fue que al rodar más lentos, con más calma porque ya era el final, se nos acercó mucha gente, conocimos más historias, y nos emocionamos con la fuerza de voluntad de muchos de los participantes.

Y es que en la Titan, como en cualquier competición de este estilo, siempre hay personas con historias increíbles. Muchos corren por otros, otros por ellos mismos, pero todos con un fin. Porque de aquí te llevas mucho más que un trofeo, que un puesto en el ranking, que una piedra… Algo que va más allá de eso, algo que te cambia y te hace mejor. Y yo no puedo estar más contenta de haberlo conseguido, porque me llevo solo cosas buenas, y porque lo recordaré para siempre.

Gira Documental Hermanos Titanes

Todas esas historias, esos momentos increíbles, los buenos y los que no lo fueron tanto, los juntaremos en el documental, que estará lleno de emoción y será el mejor recuerdo que podremos tener.

Si queréis revivir esta Titan con nosotros podéis venir a nuestra gira, en la que proyectaremos el docu y estaremos hablando sobre la experiencia. Aquí os dejo las fechas y lugares:

31.05 Lloret de Mar

01.06 Valencia

02.06 Alicante por la mañana

02.06 Murcia por la tarde

03.06 Málaga por la mañana

03.06 Marbella por la tarde

04.06 Cádiz

05.06 Sevilla

06.06 Madrid

07.06 Barcelona

09.06 Vitoria por la tarde

10.06 San Sebastián por la mañana

10.06 Bilbao por la tarde

Agradecimientos

Finalmente quería agradecer profuntamente todo el apoyo primero de todo a mi hermano Valentí Sanjuan por acomañarme y cuidarme como una reina. A todo mi equipo de Gordon Seen por estar en todo momento pendiente de mí, desde la distancia pero siempre presentes. A Ester Sin H que me acompañó al desierto y me grabó, me cuidó, me animó y me dio muchísimo cariño. A Rubén y a Victor de Menos cabeza más corazón por todas las fotos y vídeo y el soporte moral.

Y también a BH Bikes por ese pedazo de bici personalizada Alma Libre, que junto a ella conseguí cruzar la meta. A SuralSport por la equipación  y que ya podéis encontrar en mi web en preventa. A Madform por la vaselina, sus cremas recuperadoras y solares. A fisioterapia Intecma por ponerme a punto durante los entrenamientos y dejarle a punto para llegar a la Titan en las mejores condiciones. A Pinyi Bicis que me prepararon la bici para que el desierto fuera más liviano. A +quebici por la asistencia mecánica que me prestaron durante toda la prueba y la asistencia de fisios que me cuidaron como una reina. A toda la organización de la Titan Desert por organizar una aventura tan humana y espectacular.

Y en definitiva mil gracias a todos vosotros que empujáis siempre con vuestros ánimos y vuestro cariño a través de redes sociales. Os quiero, ¡sois mi gasolina!

A todos vosotros gracias y recordad que esta Titan es también en parte vuestra, ¡porque juntos lo hemos conseguido!